¿Alguna vez te has preguntado si te conoces? ¿si?, puede ser que algunas veces las personas puedan sentir que se conocen, que tienen el poder de sumergirse en ellas en cuestión de segundos y regresar al exterior con la respuesta que nos hará ganar el conocimiento infinito del ser, pero la verdad es que es mucho más dificil de lo que parece, la sociedad misma nos ha encadenado a tantas cosas, que para poder encontrar aquel pequeño personaje que deseamos, necesitamos abrir y abrir puertas sin parar.
Si paramos un momento y reflexionamos y preguntamos ¿quienes somos?, encontrariamos respuestas como: "Soy una persona benevolente", "Soy Alguien elegante", "Soy mejor que los demás"..... pero todas estas respuestas son solo reflejos de lo que hemos vivido a lo largo del tiempo, y así podríamos pasar la vida sin conocernos, en nuestro lecho de muerte solo morimos, en la vida solo "sobrevivimos", nos centramos en cosas tan básicas y tan plásticas como los oscares, la ropa de marca, el mejor automóvil, etc. ¿podremos algún día descubrir que hay detrás de la máscara capitalista, anarquista, o lo que sea que nos consideremos en el momento?.
Podemos tratar de encontrar soluciones a la ecuación, pero probablemente no la encontremos, aunque a veces la respuesta es más básica de lo que parece, lo sabemos y siempre lo sabremos, pero las circunstancias no nos permiten accesar a aquella porción de recuerdo, vago, brillante que tenemos, cuando eres niño la vida es sencilla, simple, lineal, pero tenemos en cuenta que debemos hacer algo, la vida, el mundo en general es vistoso, alegre.... pero al crecer toda la luz que rodeaba al mundo desaparece, muchos optan por rendirse a la obscuridad que va rodeando sus alegres ojos y se convierten en entes sedientos de poder y con ansias de envidiar, de maldecir.
Por otro lado, hay quienes sin perder el brillo de su niñez se permiten tratar de cambiar, entender y conocer empezando por ellos mismos, despues se permiten acceder a los conocimientos que les proporciona el exterior, para después cambiar la comunidad donde se desenvuelven.
Hay que cuestionarnos, ¿que clase de personas somos? ¿nos dejamos llevar por la obscuridad o queremos ver la luz que envuelve al mundo? a partir de estas preguntas podremos centrarnos en nuestro ser real y centrarnos en nuestros verdaderos objetivos.
Si paramos un momento y reflexionamos y preguntamos ¿quienes somos?, encontrariamos respuestas como: "Soy una persona benevolente", "Soy Alguien elegante", "Soy mejor que los demás"..... pero todas estas respuestas son solo reflejos de lo que hemos vivido a lo largo del tiempo, y así podríamos pasar la vida sin conocernos, en nuestro lecho de muerte solo morimos, en la vida solo "sobrevivimos", nos centramos en cosas tan básicas y tan plásticas como los oscares, la ropa de marca, el mejor automóvil, etc. ¿podremos algún día descubrir que hay detrás de la máscara capitalista, anarquista, o lo que sea que nos consideremos en el momento?.
Podemos tratar de encontrar soluciones a la ecuación, pero probablemente no la encontremos, aunque a veces la respuesta es más básica de lo que parece, lo sabemos y siempre lo sabremos, pero las circunstancias no nos permiten accesar a aquella porción de recuerdo, vago, brillante que tenemos, cuando eres niño la vida es sencilla, simple, lineal, pero tenemos en cuenta que debemos hacer algo, la vida, el mundo en general es vistoso, alegre.... pero al crecer toda la luz que rodeaba al mundo desaparece, muchos optan por rendirse a la obscuridad que va rodeando sus alegres ojos y se convierten en entes sedientos de poder y con ansias de envidiar, de maldecir.
Por otro lado, hay quienes sin perder el brillo de su niñez se permiten tratar de cambiar, entender y conocer empezando por ellos mismos, despues se permiten acceder a los conocimientos que les proporciona el exterior, para después cambiar la comunidad donde se desenvuelven.
Hay que cuestionarnos, ¿que clase de personas somos? ¿nos dejamos llevar por la obscuridad o queremos ver la luz que envuelve al mundo? a partir de estas preguntas podremos centrarnos en nuestro ser real y centrarnos en nuestros verdaderos objetivos.
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